Mi pasión por el pointer empieza a una edad muy temprana, con los 18 años recién cumplidos. En el año 1992, empiezo con mis primeras salidas al campo tras las perdices, y en esa misma temporada adquiero mi primer pointer Chuck. Excelente compañero y gran cazador, con unos vientos impresionantes y una compenetración conmigo que cuando teniamos las perdices delante de nostros me lo decia con la mirada.
Chuck fue un compañero infatigable, disfrutando de muy buenas jornadas de caza. Pasados unos años adquiero una hembra,Inca procedente de un amigo, con la que realizo algunas camadas resultando unos cachorros muy buenos cazadores. Desde estas camadas, me quedé enamorado con la cria de esta raza.
Chuck finalmente murió y seguí cazando con un hijo suyo, hasta que decidí emprender este gran desafio,criar en busca de ese gran campeón con el que todos soñamos.
Aunque yo ya tube mi primer campeón, Chuck en tu memoria…